Los nuevos retos de la Cultural en Segunda B
Sin embargo la Cultural asume tras el ascenso retos igual o más complicados que los vividos hasta la fecha. En apenas ocho semanas esta vieja sociedad anónima deportiva ha vivido dos ascensos y un descenso.
Lograr que la entidad milite en Segunda B ha supuesto un esfuerzo económico de tal calibre que realmente se ha llevado por delante todos los recursos económicos generados con la ampliación de capital, todo el esfuerzo inversor de que disponía su junta gestora e incluso un esfuerzo adicional por parte de la plantilla (que ha asumido un recorte salarial sin precedentes) y el propio técnico (Luis Cembranos, realmente, será el primer entrenador del fútbol nacional que pague por entrenar).
Vivir de uno mismo
Tanto esfuerzo deja a la Cultural a partir de hoy ante otro reto casi imposible: vivir de sí misma. Esto es, 'tanto' se ingresa en la caja, 'tanto' se puede gastar.
De ahí que para hacer equipo (y a la Cultural le queda mucho para perfilar su plantilla) deberá recurrir principalmente a cesiones sin coste de jugadores. No hay otra fórmula.
Además el equipo hará un llamamiento "a León y a los leoneses" porque sólo con la implicación de todos los leoneses será posible hacer frente a los gastos.
'Buenos' rivales, 'buenas' taquillas
De momento la gestora ya se ha puesto a trabajar en los carnets de socios, la fuente más importante de ingresos para los primeros meses de la temporada. Pero sólo con esa parte será insuficiente. Se necesita mucho más.
Ayuda el grupo en el que el equipo militará. Por León pasarán equipos como el Oviedo, el Orense, el Santander, el Sporting B. Las taquillas también echarán una mano.
Desde la Cultural ya se llama a la ciudad, pese a la crisis económica. "Lo hemos dado todo y lo hemos conseguido, ahora esperamos una respuesta de León", se advierte.